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Un estudio de Fisabio y el IIS La Fe demuestra la influencia directa del tratamiento antibiótico sobre los niveles intestinales de Enterobacterias multirresistentes

Las personas con leucemia aguda frecuentemente presentan colonización por enterobacterias multirresistentes en el intestino que pueden llegar a diseminarse en sangre y causar infecciones difíciles de tratar. A día de hoy todavía se sabe muy poco sobre cómo varían los niveles de enterobacterias multirresistentes y qué factores influyen en los mismos.

Por eso se ha llevado a cabo uno de los estudios más extensos de cuantificación de enterobacterias multirresistentes en heces en pacientes con leucemia aguda. En el trabajo han participado investigadores/as de la Fundació per al Foment de la Investigació Sanitària i Biomèdica de la Comunitat Valenciana (Fisabio) junto a los Servicios de Hematología, Microbiología y Unidad de Enfermedades Infecciosas del Hospital Universitario y Politécnico La Fe.

"La presencia de niveles altos de dichas bacterias en el intestino promueve su diseminación a sangre y podría favorecer la transmisión a otros pacientes mediante la contaminación del ambiente hospitalario", asegura Carles Úbeda, investigador  principal del grupo 'Microbiota, infección e inflamación' de la Fundació Fisabio.

Para el estudio se han analizado 802 muestras de heces de 133 pacientes hospitalizados en el Hospital Universitario y Politécnico La Fe entre noviembre de 2013 y abril de 2015. Durante este periodo, los/as pacientes que se prestaron a realizar el estudio fueron ingresados una media de tres ocasiones. Las causas del ingreso se debían, principalmente, al tratamiento de quimioterapia, a infecciones o procedimientos de trasplante de progenitores hematopoyéticos.

El seguimiento por cultivo detectó la presencia de enterobacterias multirresistentes en 221 de todas las muestras analizadas, pertenecientes a 80 pacientes (60%), un porcentaje elevado. "Sin embargo, los niveles detectados eran muy variables dependiendo de la muestra y el paciente; de hecho, se han encontrado diferencias de más de un millón en los niveles de enterobacterias", destaca Carles Úbeda.

Habitualmente los/las pacientes que padecen leucemia reciben tratamientos con antibióticos durante los periodos que transcurren hospitalizados. Excepto el ciproxoflacino, que se administra de forma oral, todos los demás se administran de manera intravenosa.

En el estudio se ha demostrado que la administración intravenosa de beta-lactámicos disminuye los niveles de enterobacterias multirresistentes que son sensibles al antibiótico administrado. Sin embargo, el antibiótico meropenem promovió el crecimiento de enterobacterias resistentes a dicho antibiótico. Por ello, el estudio ha destacado la relevancia de incorporar el patrón de resistencia a los antibióticos de las enterobacterias que colonicen el intestino a la hora de decidir el mejor tratamiento empírico a aplicar al paciente.

Además, el estudio ha demostrado que la vigilancia cuantitativa de patógenos resistentes aporta una información adicional a la vigilancia cualitativa (actualmente en uso) que podría ser de gran ayuda en un futuro con el fin de prevenir la diseminación de este tipo de patógenos.

En el estudio, que cuenta con el apoyo de la subvención InfectERA-ERANET-Acciones [PCIN-2015-094] , del Ministerio de Economía y Competititividad y  una beca FPU del Ministerio de Educación, Cultura y Deporte, también han participado investigadores/as del CIBERONC, del Instituto Gulbenkian de Ciencia de Portugal, del Sloan-Kettering de Nueva York y de las universidades de Munich y de Toulouse.

El 60% de los pacientes hospitalizados con leucemia aguda presentan enterobacterias multirresistentes en su intestino

El estudio recalca la importancia de incorporar en la práctica clínica información de los patrones de resistencia de las enterobacterias